El Partido Obrero de Unificación Marxista (POUM) fue un protagonista singular de la Guerra Civil Española. Nacido de la fusión de dos corrientes marxistas críticas con Moscú, alcanzó una relevancia militar y política inesperada, pero terminó aplastado por la represión en el propio bando republicano. Su historia es la de un partido incómodo, atrapado entre revolución y guerra.

Los orígenes de un marxismo independiente
El POUM se fundó en Barcelona el 30 de septiembre de 1935, fruto de la unión del Bloque Obrero y Campesino, dirigido por Joaquín Maurín, y la Izquierda Comunista de España, liderada por Andreu Nin. Ambos procedían del marxismo revolucionario, pero se distanciaban del estalinismo y rechazaban la subordinación a la URSS.
Su programa defendía un socialismo democrático y obrero, con protagonismo de los comités y sindicatos, y apostaba por unir la lucha contra el fascismo a la transformación revolucionaria.
El POUM en la Guerra Civil
Tras el golpe de julio de 1936, el POUM se volcó en la defensa de la República. Organizó una columna de milicianos que combatió en Aragón, transformada más tarde en la 29.ª División. Entre sus filas se incorporaron voluntarios internacionales, como el escritor George Orwell, que dejó en Homenaje a Cataluña un retrato inolvidable de aquella experiencia.
En el plano político, el POUM logró un hito en septiembre de 1936: Andreu Nin entró en el gobierno de la Generalitat como conseller de Justicia. Su paso fue breve —hasta diciembre—, cuando las presiones internas y externas lo forzaron a dimitir.

Los Hechos de Mayo de 1937
El gran punto de inflexión llegó en mayo de 1937, cuando estallaron en Barcelona violentos enfrentamientos entre militantes anarquistas y poumistas contra las fuerzas de orden público ligadas al PSUC. Aquella guerra civil dentro de la guerra abrió una brecha irreversible en el campo republicano.
El POUM fue acusado de fomentar los disturbios, y el nuevo gobierno de Juan Negrín, apoyado por el PCE y la influencia soviética, decidió eliminarlo como actor político.
Represión y desaparición
El 16 de junio de 1937, el POUM fue ilegalizado y su líder más visible, Andreu Nin, fue secuestrado y asesinado por agentes vinculados a los servicios soviéticos, en un episodio cuyo cuerpo nunca apareció.
En octubre de 1938 se celebró un juicio contra la dirección del partido por supuesta traición y espionaje. Aunque se dictaron condenas menores, el tribunal desestimó las acusaciones principales: no había pruebas de colaboración con Franco.
La 29.ª División fue disuelta y el partido quedó desmantelado. Muchos militantes marcharon al exilio, otros sufrieron prisión, y algunos acabaron perseguidos nuevamente tras la victoria franquista.
El legado del POUM
La historia del POUM condensa las tensiones de la Guerra Civil: ¿priorizar la revolución social o la unidad contra el fascismo? La decisión de Negrín y los comunistas fue clara: aplastar cualquier disidencia.
Hoy, el POUM es recordado como un marxismo independiente, que buscó una tercera vía entre el dogmatismo soviético y el reformismo socialdemócrata. Su derrota mostró que la República también fue escenario de luchas internas que debilitaron el esfuerzo común contra Franco.
Enlaces de interés
- Wikipedia (es): Partido Obrero de Unificación Marxista
- Britannica: Workers’ Party of Marxist Unification (POUM)
- Fundación Andreu Nin: Qué es y qué quiere el POUM
- Wikipedia (es): Jornadas de Mayo de 1937
- Wikipedia (es): Andreu Nin
- Wikipedia (en): Homage to Catalonia
- Al Loro: Brigadas Internacionales en la Guerra Civil Española: historia y legado
Nota: La ilustración principal que acompaña este artículo han sido generada y editada con fines exclusivamente ilustrativos.