Fundada por el emperador Nerón en el turbulento año 66 d.C., la Legio I Italica nació con un propósito imperial ambicioso: una campaña hacia Oriente, hasta los confines del Caspio. Sin embargo, el destino le tenía reservado otro camino. En las frías riberas del Danubio se convertiría en una de las unidades más longevas, estables y fascinantes del ejército romano. Su historia es la de una legión que combinó la fuerza bélica con la ingeniería, la fidelidad con la resiliencia, y que dejó huella durante más de cuatro siglos.

Orígenes bajo Nerón
La fundación de la Legio I Italica se produjo en un contexto de expansión frustrada. Nerón pretendía iniciar una campaña en Armenia, y reclutó para ello una legión de soldados de élite, todos con una estatura superior a la media romana (unos 1,77 m). Aquellos hombres recibirían el nombre simbólico de Phalanx Alexandri Magni, en honor al mítico conquistador macedonio.
Según fuentes epigráficas, el estandarte con el águila legionaria habría sido entregado en torno al 20 de septiembre del 66 d.C., aunque algunos estudios modernos la sitúan ligeramente posterior. Sin embargo, las convulsiones políticas del Imperio desviaron su destino: antes de partir al este, la unidad fue enviada a sofocar la rebelión de Cayo Julio Vindex en la Galia.
Cuando Nerón cayó y el Imperio se hundió en la guerra civil del Año de los Cuatro Emperadores (69 d.C.), la I Italica apoyó a Aulo Vitelio. Luchó en la batalla de Bedriacum, pero tras la victoria de Vespasiano fue reubicada definitivamente en Moesia Inferior, donde se instaló en el campamento de Novae, junto al Danubio.
Novae: la fortaleza eterna
En Novae —actual Svishtov, Bulgaria—, la Legio I Italica levantó una auténtica ciudad militar. Su campamento, de más de 17 hectáreas, fue construido en piedra con precisión geométrica: murallas, torreones, cuarteles, termas, templos y talleres conformaban un microcosmos romano a orillas del limes. Era una ciudad dentro del ejército, un bastión de Roma en el extremo del mundo.
La I Italica permaneció en Novae de forma casi continua desde finales del siglo I hasta comienzos del siglo V. Desde su base en el Danubio, combinó su papel militar con una destacada actividad constructiva: fortificaciones, puentes y obras públicas que consolidaron la frontera romana.
Una legión de ingenieros
Más allá del combate, la Legio I Italica destacó por su destreza constructiva. Era una legión que construía imperios mientras los defendía. Pudo colaborar en obras monumentales como el puente de Trajano sobre el Danubio, diseñado por Apolodoro de Damasco. En el siglo II, algunos investigadores sugieren que destacamentos suyos pudieron participar en la construcción del Muro Antonino, aunque las pruebas son indirectas.
Durante el reinado de Caracalla, la unidad contribuyó a la fortificación del Limes Transalutanus, una línea defensiva avanzada en Dacia. Sus labores de ingeniería, documentadas en inscripciones como CIL III, 12345–12367 y AE 1976, 567, demuestran su papel crucial en la consolidación del sistema fronterizo romano.

En campaña: Dacia, Partia y el norte bárbaro
Durante las guerras dacias de Domiciano y Trajano (finales del siglo I y comienzos del II), la I Italica se enfrentó a los ejércitos del rey Decébalo y desempeñó funciones de apoyo fluvial y defensa de los pasos danubianos.
Décadas después, el escenario cambiaría. Las fronteras del Danubio dieron paso a los desiertos de Oriente.
En el siglo III, bajo Septimio Severo, el contingente fue enviado a Oriente para participar en la campaña contra los partos. Más tarde, serviría en misiones dispersas en Egipto y Asia Menor, prueba de su movilidad estratégica.
Su papel no se limitó a la guerra: en periodos de paz, sus tropas fundaban colonias, edificaban templos y mantenían el orden en Moesia, actuando como administradores y constructores del Imperio.
Identidad y símbolos
El emblema distintivo de la Legio I Italica era el jabalí, símbolo de fuerza y fiereza. Sus estandartes lucieron títulos honoríficos concedidos por diversos emperadores: Antoniniana bajo Caracalla, Severiana en tiempos de Septimio Severo, Gordiana bajo Gordiano III y el más perdurable, Pia Fidelis —“leal y fiel”.
A nivel cultural, la unidad desarrolló una identidad local muy marcada. Las excavaciones en Novae han revelado inscripciones votivas dedicadas a Júpiter, Marte y a los dioses tutelares del ejército, así como estelas funerarias de centuriones y veteranos. Estas piedras, con nombres y fechas grabadas, son hoy una de las fuentes más ricas para el estudio de la vida militar romana.
Crisis y renacimiento
Durante el siglo III, la Legio I Italica sufrió los vaivenes de la anarquía imperial. En algunos periodos, su nombre fue borrado de inscripciones oficiales —una damnatio memoriae temporal—, aunque fue rehabilitada bajo Gordiano III, recuperando su título Gordiana Pia Fidelis. Pocas legiones sobrevivieron a tantas crisis; ninguna con tanta lealtad.
Con la reorganización de Diocleciano y la posterior Tetrarquía, parte de sus tropas fue integrada en los ejércitos móviles (comitatenses), mientras otras permanecieron en el Danubio, custodiando las fronteras.
La Notitia Dignitatum —documento administrativo del siglo V— todavía menciona la presencia de la I Italica en Novae y Sexaginta Prista, lo que confirma su supervivencia más allá de la caída del Imperio de Occidente.
Arqueología y legado
Las ruinas de Novae constituyen hoy uno de los conjuntos militares romanos mejor conservados de Europa. Las excavaciones han identificado los principia (cuartel general), el valetudinarium (hospital), termas, templos y talleres legionarios.
Cada estrato arqueológico refleja la permanencia prolongada de la unidad, desde la época de Vespasiano hasta la de Honorio. La epigrafía hallada en Novae permite trazar con precisión su estructura interna y evolución a lo largo de los siglos.
Una legión que sobrevivió al Imperio
Durante más de cuatro siglos, fue testigo de la evolución del poder romano en las fronteras. Su historia resume la esencia del Imperio: disciplina, lealtad y una asombrosa capacidad de adaptación.
En el eco del Danubio… su legado sigue vivo.

Enlaces de interés
- Wikipedia: Legio I Italica
- Livius.org: Legio I Italica
- Viator Imperi: Novae. El campamento de la Legio I Italica
- Al Loro: Cayo Mario: las reformas militares y las mulas de Mario
- Canabae Novaes: Excavaciones en Novae
- Academia.edu: Legio I Italica at Novae
- Roman Military History: Legio I Italica
- Al Loro: Legio I Germanica